Traducía palabras como "orilla" o "razón". Traducía "angustia".
Traducía "llaga".
Nunca perdió la calma. No del todo.
Traducía del árabe al hebreo,
del hebreo al latín.
No sé qué hizo con esos vocablos.
Malgastó su ejército en todas esas guerras,
pues, aunque no lo supiera,
nadie quiso nunca
escucharla.
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